Más esfuerzo sí, pero todos
Han pasado varios días y aún no nos hemos repuesto de la subida de impuestos decidida por el Gobierno. Tampoco de que Rajoy no haya salido a explicarnos las razones por las que ha cambiado de criterio. Ya sabemos que el agujero de las cuentas públicas que dejó Zapatero es mucho mayor del que habían dicho y que los problemas de tesorería, también en la Seguridad Social, son acuciantes. Pero se echa de menos una explicación más allá de pedirnos un esfuerzo más. Se equivocan, porque lo más probable es que lo entendiéramos. De hecho, ya nos esperábamos una subida de impuestos, puede que no del IRPF, pero sí de otros. Creo que en general los españoles estamos por la labor de sacrificarnos más, pero también queremos ver que este llegue a todos, sobre todo a las Administraciones Públicas. Se ha hecho una primera criba de gasto, pero totalmente insuficiente. Hay miles de millones de gasto público perfectamente prescindible y muchas empresas por vender o cerrar. Sin ir más lejos, Rajoy nos prometió acabar con las subvenciones a sindicatos, partidos políticos y patronales y de momento la rebaja ha sido del 20% y no de las partidas mollares.
La situación de España es de emergencia, pero la subida del IRPF nos va a poner a los ciudadanos y a los inversores en una situación complicada. Hay que esperar a las próximas reformas, recortes y medidas de ayuda a los emprendedores y autónomos. Claro que el Gobierno no lleva ni un mes gobernando y que su llegada no iba a ser la “purga de Benito”. Pero, al sacrificio exigido, y ya son muchos en forma de empleo y salarios, debería dársele una contrapartida y muchas explicaciones. En Madrid se ha hecho y ha salido muy bien. Nos dice Montoro que al final de la legislatura los impuestos habrán bajado y que el esfuerzo no será en vano. Esperaremos.
La situación de España es de emergencia, pero la subida del IRPF nos va a poner a los ciudadanos y a los inversores en una situación complicada. Hay que esperar a las próximas reformas, recortes y medidas de ayuda a los emprendedores y autónomos. Claro que el Gobierno no lleva ni un mes gobernando y que su llegada no iba a ser la “purga de Benito”. Pero, al sacrificio exigido, y ya son muchos en forma de empleo y salarios, debería dársele una contrapartida y muchas explicaciones. En Madrid se ha hecho y ha salido muy bien. Nos dice Montoro que al final de la legislatura los impuestos habrán bajado y que el esfuerzo no será en vano. Esperaremos.