Buscar este blog


Las lluvias se hacen esperar en el sur de Brasil

El estado posicionado como el tercer mayor productor de soja de Brasil, Río Grande do Sul, podría recibir en pocos días unas primeras lluvias leves que, entre el 14 y el 18 de enero darían paso a las grandes lluvias necesarias para el cultivo.
Por sus condiciones climatológicas, este estado procede a la siembra más tarde que el resto, por lo que la cosecha de soja aún podría salvarse siempre que las lluvias no se demoren más allá del 20 de enero. La soja es el segundo producto que, principalmente, se exporta a China, el mayor socio comercial de Brasil, por lo que la soja se presenta como una importante fuente de ingresos para la economía emergente latinoamericana.
Paraná, el principal estado productor de maíz, podría sufrir el mismo proceso de grandes lluvias precedidas por llovizna, aunque la aridez de la sequía ya ha provocado, en este caso, pérdidas irreparables.
Esta sequía se achaca al fenómeno meteorológico llamado La Niña, que también ha afectado a algunas zonas de Argentina, provocando que el mercado internacional reaccione a la escasez de grano que la sequía puede producir. Esto ha causado que, en el mercado de Chicago, los precios de los futuros del maíz hayan sufrido un alza del 15%, y de un 13% en el caso de la soja.
Celeres, empresa dedicada al análisis del grano de cereal, ha recortado el pasado lunes su previsión de producción agrícola para Brasil, a causa de la sequía. Antes del fenómeno meteológico, se estimaba que la producción de soja ascendería a 75.6 millones de toneladas, cuando ahora se estima en 74.4 millones. En el caso del maíz, las previsiones han descendido hasta 61.98 millones cuando, antes de la sequía, era de 63.32 millones.
La primera semana de 2012, Río Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná rebajaron sus estimaciones sobre la cantidad de cultivos esperados, mientras se continúa esperando alpróximo martes para que la gubernamental Conab haga públicas sus estimaciones sobre el asunto tras la sequía.
El caso de Mato Grosso do Sul, principal estado productor de soja, es distinto ya que sus habitantes acaban de iniciar la recogida de cultivos. Sin embargo, la tarea se ha visto ralentizada a causa de las lluvias, ya que la maquinaria necesita un suelo con menor humedad para proceder. Los cultivos de este estado se han visto favorecidos por el buen tiempo del que ha gozado la región.