La pérdida de valor de la filial en EE UU resta 1.000 millones al resultado del BBVA
El BBVA ha decidido reconocer en sus cuentas del ejercicio 2011 la pérdida de valor de su negocio en Estados Unidos. Pese a que el BBVA pagó un alto precio por Compass y otras entidades poco antes de que estallase la crisis financiera y Estados Unidos entrase en recesión, la entidad se había resistido hasta ahora a realizar ajustes en el fondo de comercio (el sobreprecio que pagó por encima del valor contable). Ahora lo ha hecho por un importe neto de 1.000 millones de euros, que tendrán un impacto directo en el beneficio de la entidad. En cambio, eso no supone salida de caja ni afecta a la liquidez ni a la política de dividendos del grupo. Y, curiosamente, el reconocimiento contable de la pérdida de valor mejora la solvencia en unos 400 millones, de modo que el saneamiento ayuda al BBVA a cumplir con las exigencias de capital.